Mi introducción, es introducir los mensajes recibidos del cósmo. Dar a conocer los vedaderos mandamientos celestiales. Que la humanidad comprenda que somos eternos. Que somos espíritus encarnados y que no morimos. Mi Señor me enseñó que somos seres eternos y lo que muere es el cuerpo físico. Que tienen que despertar la conciencia si quieren recibir al único maestro, Jesucristo. El alma necesita limpieza, y la conciencia educarse cósmicamente.